Milagros Socorro.- Karl Krispin es escritor venezolano. Es egresado de la Escuela de Letras de la Universidad Católica Andrés Bello, Caracas,e hizo una maestría en Ciencias Políticas en Tulane University en New Orleans, Lousiana. Es narrador, ensayista y articulista. Es profesor de Historia en la Universidad Metropolitana, Caracas.

–¿Qué estrella de cine persiste en su admiración desde su infancia?

–Más que estrella de cine, un visionario que fue factor de cine y de historias inolvidables: Walt Disney, a quien he dedicado uno de mis minicuentos llamándolo “benefactor de la humanidad”.

–¿Qué clásico del cine tiene ganada una reputación injusta?

–Jamás he resistido el Ciudadano Kane. He intentado verla unas tres veces y siempre me he quedado dormido.

–¿Cuál es la película que ha visto el mayor número de veces?

–El puente sobre el río Kwaiy Doctor Zhivago. Ambas de David Lean.

–¿Cuál es el mal actor cuyas interpretaciones usted, sin embargo, disfruta?

–La película ideal, desde el punto de vista del acartonamiento actoral, estaría protagonizada por Raúl Amundaray y Lupita Ferrer en los roles estelares. Una versión actualizada y decadente de Doña Bárbara. Amundaray como Santos Luzardo y Lupita, como la “devoradora de hombres”.

–¿Cuál fue la última película cuya proyección abandonó antes de finalizar?

–Me salí de El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante, de Peter Greenaway. Básicamente, me pareció un insulto.

–¿Qué es lo que en verdad no soporta en una película?

–Me molestan las películas con un guión débil, en particular aquellas que se burlan y engañan al espectador ocultando una resolución inverosímil con la que engañan a la audiencia. Hollywood y sus plots “inteligentes” han caído recientemente en esta manipulación.

–¿Ha copiado alguna vez un modelo de vestido, un peinado, un gesto o una actitud de algún actor o actriz?

–Desearía tener el Aston Martin de la serie James Bond.

–¿Cuál es la película con la que más ha llorado?

–Un culebrón del cine mexicano: Cuando los hijos se van.

–¿Cuál es la película que más lo ha hecho reír?

–Todas las de Louis de Funes.

–¿Cuál es la peor película que ha visto en su vida?

–Detesto particularmente Fresa y chocolate.

–¿Se ha enamorado alguna vez de un actor o actriz?

Nadie se enamora de las actrices, a menos que se trate del desquiciado que persigue a Jodie Foster. Sin embargo,Emmanuelle Beart en Manon del manantial resulta una mujer para nunca ser olvidada.

–¿Qué parlamento de película suele citar en sus conversaciones?

–Hay una escena de El hijo de la novia, de Juan José Campanella. Ricardo Darín interpreta a Rafael Belvedere que tiene un restaurante en Buenos Aires. Belvedere se comunica con su proveedor de vinos y le pide veinte cajas de vino tinto y una de blanco porque “siempre hay un boludo que pide blanco”.

–¿Quiénes son la actriz y el actor que más admira en la actualidad?

–He escrito sobre Scarlett Johansson, lo cual delata una admiración. Me atraen su ambicionado cuerpo de diosa vikinga y su figura deslizándose como una serpiente peligrosa entre las sábanas de los apartamentos de Londres.

–¿A cuál actor o actriz no le encuentra ningún atractivo… a pesar de que su pareja y/o amigos insisten en que es lo máximo?

–Insisto en que en cada estación del metro de Madrid hay una Penélope Cruz,lo cual nadie me cree. Es decir, me parece que Penélope posee un atractivo muy común y por tanto muy poco interesante. Como actriz es mucho peor y bastante gritona, lo cual la ha convertido en una verdadera hortera globalizada.

–¿Qué película está ligada a su vida?

–Creo que las de Carlos Saura, no por otra cosa sino porque las vi todas en Mi Cine La Pirámide, una adorable sala de cine artístico a la que asistía con frecuencia en bachillerato. Siento nostalgia por esa época y por ese cine. Filmes como La prima Angélica oPeppermintFrappé… quisiera volver a verlos en una representación ideal del segundo piso de esa sala, que nadie conocía y donde te sentías como en una representación privada.

–¿Cuál es la historia que el cine nacional debe filmar cuanto antes?

–El arte no suele tener prisa ni debería tenerla. Una buena historia para ser filmada es cómo pasamos de ser un país extraordinario, con cierta educación, buenas costumbres y gente muy ponderada, a esta ranchería de malandros corruptos y vulgares. Una historia muy dolorosa, por lo demás.

 

@MilagrosSocorro